lunes, 11 de enero de 2010

MÓRITE

Anoche tuve una re idea.
Qué buena onda mandar como respuesta, en un mensaje de texto: "Mórite".
Es genial. Por ejemplo, mira:
Hipótesis 1 (un uno con palito abajo, lindo, como éste):
-"Mándame los apuntes de la clase del viernes, porfas!"
Ahí yo te respondería: "Mórite"
Hipótesis 2 (un dos con rulito, como éste):
-"Te espero en tal lado"
Ahí, sin pensarlo dos veces, contesto: "Mórite".
Y no agregar más nada. Descolocar al interlocutor.
Ojo, quien tiene ganas de mandar tal texto -que vendría ser a yo, más que nada a un compañero pesado de la facultad que no me aceptó en el Facebook pero me pide los apuntes, los resúmenes y los trábajo prácticos- tendría que estar ocupado en alguna tarea.
Bueno, tampoco es necesario estar ocupado. Si uno tiene ganas, lo puede mandar sin cavilaciones.
Después, de última, bancarse ser odiado.

CORAZÓN BERRETA

¿Por qué el amor siempre se relaciona con el corazón?. Ni siquiera es un órgano copado, tipo el hígado.
¿Por qué no lo relacionamos con el bazo?, que no tiene mucho protagonismo por sí solo.
O por qué no al apéndice, para que sea un toque más novelero, más romántico si tenes apendicitis. Podemos crear tipo un mito, a quienes le hayan extirpado el apéndice no pueden desarrollar la capacidad de amar, y sinfín de boludeces que se nos ocurran en el momento.
Chamuyo berreta, eso del corazón y el amor.
¡Relacionémoslo con una glándula, tipo la hipófisis!.
¡Mejor aún, intestinos!. Por lo menos, habrían muchos comediantes con mucho laburo, haciendo chistes de doble sentido.
Quien apoye la moción, puede crear un grupo de Facebook. Podemos llamarlo "El corazón es re choto para el amor, aguanten los intestinos", o cualquier otra tontería símil.